Saber cómo prevenir la listeriosis es hoy una de las principales preocupaciones de los españoles. El aumento de casos provocados por esta infección ha obligado a declarar la alerta alimentaria a nivel nacional.
QUÉ ES LA LISTERIOSIS ¿SE PUEDE PREVENIR?
La listeriosis es una infección provocada por bacteria Listeria monocytogenes, poco frecuente en humanos pero que puede ser extremadamente grave.
Es un microorganismo ambiental que se desarrolla a gran velocidad. Incluso puede multiplicarse en el interior de la nevera si se han introducido alimentos contaminados.
Puede estar presente en aguas residuales, vegetales crudos, carne, pescados ahumados y quesos y leche sin pasteurizar y en aquellos alimentos en los que se rompe la cadena de frío.
Esta infección ocurre cuando una persona ingiere alimentos que han sido contaminados con la bacteria llamada Listeria. Es una enfermedad que se transmite principalmente a través de la alimentación, como la Triquina, la Salmonela o el Anisakis.
Una vez que entra en nuestro aparato digestivo, si la cantidad de bacterias es alta, puede traspasar el aparato digestivo hasta la sangre.
Desde la sangre, se puede extender a otros órganos, principalmente al cerebro, provocando meningitis o encefalitis en los casos más graves.
Por tanto, su gravedad depende del estado inmunitario de la persona y de la cantidad de bacterias q contenga el alimento.
Es muy agresiva en niños, ancianos y embarazadas pudiendo entrar en la sangre del niño a través de la placenta provocando encefalitis en el niño o abortos espontáneos.
Las personas que presentan más riesgo de gravedad por esta infección, son quienes tienen bajas las defensas o déficit de alguna vitamina.
POR QUÉ APARECEN CASOS DE LISTERIOSIS
El Ministerio de Sanidad es el responsable de que todos los alimentos se sometan a un exhaustivo análisis antes de salir al mercado.
Sin embargo, si algo falla y no se detecta esta bacteria, nos encontramos con productos contaminados que han salido al mercado y pueden haber sido consumidos por un gran número de personas.
Los síntomas pueden tardar en aparecer entre una semana y 70 días por lo que se presume que muchas personas tienen esta enfermedad sin que haya dado la cara todavía aunque, a veces, se manifiesta tras ser ingerida.
La listeriosis se da a lo largo de todo el año, pero suelen ser casos aislados y de poca gravedad, quedándose en una leve gastroenteritis.
Los controles alimentarios han reducido muchos de los casos, pero no eliminan aquellos que dependen únicamente del consumidor y sobre los que sí podemos actuar.
Como prevenir la listeriosis es hoy una de las mayores preocupaciones de los consumidores.
SÍNTOMAS DE LA LISTERIOSIS
El principal problema de la Listeriosis es que no hay ningún síntoma específico que permita identificarla.
Muchos de sus síntomas son similares a los producidos por cualquier alteración intestinal o por gripe.
Los síntomas varían de unas personas a otras, dependiendo de la gravedad, de la cantidad de bacterias contaminantes y de las defensas de cada persona.
Los síntomas pueden incluir:
- diarrea
- vómitos
- malestar general
- dolor de cabeza
- rigidez en el cuello
- fiebre
- dolores musculares
- pérdida de equilibrio
- confusión
- convulsiones
Son varias las personas hospitalizadas cuyo único síntoma ha sido diarrea.
En mujeres embarazadas, los síntomas pueden confundirse con una gripe. La mayoría presentan dolor de cabeza y malestar general. Algunas han informado que tenían la presión baja, demasiado alta.
COMO PREVENIR LA LISTERIOSIS
Dado que la principal vía de entrada de esta bacteria en el organismo es por la alimentación, hay una serie de recomendaciones a tener en cuenta para prevenir esta infección.
Son recomendaciones que debemos seguir a lo largo de todo el año.
Aunque este brote se relaciona con unos productos concretos contaminados, estas bacterias pueden aparecer en cualquier alimento si no seguimos una serie de indicaciones.
Si bien, la mayoría de las veces suele quedarse en una ligera gastroenteritis
- Lavar bien frutas y verduras al llegar a casa, antes de introducirlos en la nevera.
- No dejar los alimentos que necesitan refrigeración, a temperatura ambiente, sobre todo, cuando hace calor.
- En la nevera, mantener separados las frutas y verduras de los alimentos ya elaborados.
- No consumir productos lácteos que no hayan sido pasteurizados, sobre todo los quesos blandos, de untar.
- No romper la cadena de frío. Si se compran alimentos congelados, no volver a meterlos en el congelador al llegar a casa, consumirlos en el día.
Si es posible, utilizar bolsas isotérmicas para trasladar los productos que necesitan ser conservados en frío, desde el supermercado hasta nuestro domicilio. - Cocinar a temperaturas superiores a 65º.
- La comida rápida, preparada para llevar, es donde es más frecuente la contaminación por el tipo de manipulación y almacenamiento.
- Por supuesto, estar al tanto de las noticias que aparezcan en los medios de comunicación avisando de brotes de listeriosis y no consumir esos productos
TRATAMIENTO DE LA LISTERIOSIS
Las personas sanas, que nos están incluidos en ninguno de los grupos de riesgo, no suelen necesitar ningún tratamiento. Los síntomas suelen remitir por sí solos en unos días.
Sin embargo, las mujeres embarazadas, ancianos, menores de 3 años y quienes tienen un sistema inmunológico debilitado deben ser tratados en hospital con antibióticos administrados por vía intravenosa.
Saber como identificar los síntomas es algo indispensable para luchar contra esta infección. El tratamiento al principio de la infección, puede reducir el riesgo de complicaciones.